Enma, retomo tu propuesta: animemos a la gente: si quienes hemos tenido ocasión de intervenir o revisar ejemplares de hierro prerromano hacemos una puesta en común de nuestras observaciones, podremos avanzar mucho para dibujar un cuadro panorámico de la presencia de magnetitas metalúrgicas en las diferentes áreas culturales. ¿Que alguien ha revisado material prerromano pero no ha visto superficies con magnetita?. Revisa tus fichas y la imágenes que tengas guardadas. El reconocimiento visual es muy evidente en alguos casos, y mi impresión es que los mejores ejemplos se conservan en las panoplias ibéricas del Levante y el Sur, falcatas, lanzas, puñales..., ¿magnetitas mejor conservadas porque fueron mejor elaboradas, más gruesas y compactas?.
Desde luego, los buenos ejemplos no faltan en el mundo celtíbero, ni en el vetón, ni en el vacceo, ni en la Meseta, ni en el Ebro. En este espacio geográfico se ubica La Hoya, en el alto Ebro de fácil acceso a la Meseta, con la que parece tan vinculada. Las panoplias montebernorio que aparecen en esta necrópolis presentan, mi impresión es que todas, (aunque el grado de conservación no permite una confirmación de todos los casos sin anáisis complementarios) recubrimientos de magnetita, simple o doble: retomaré el tema más adelante.
Para los ejemplares mejor conservados las características morfoestrcturles no dejan lugar a dudas (las fotos de este blog son buenos ejemplos). Se trata de una película superficial de magnetita delgada, continua y muy poco porosa, preservando un núcleo metálico sano, por lo que incluso, a veces, apenas se identifican morfoestructuras de alteración ni le cubren depósitos macroscópicos de corrosión, lo que permite su reconocimiento en el mismo momento de su excavación arqueológica. Si aparecen compuestos externos de corrosión tienden a adquirir una morfología compacta-incrustada, escasamente desarrollada y fácilmente extraíble por su discontinuidad entre capas. Es habitual que en estos casos también cubra la superficie una capa bastante regular y concrecionada de arcillas y carbonato cálcico que incluso refuerza la protección aislante. Desde luego son superficies de evolución inusuales y muy llamativas. Aunque lo normal es que alterne áreas mejor o peor conservadas.
Para ejemplares peor conservados es posible que pueda establecerse un catálogo de morfoestructuras de corrosión asociadas, según el grado de deterioro y calidad de la película. Esa impresión tenemos con los ejemplos de La Hoya. Con un repertorio de ejemplos peninsulares más amplio podríamos trabajar sobre ello.
3 comentarios:
Parece que la gente no está muy dispuesta a colaborar...Revisare mis fichas "historicas", porque hace tiempo que no pillo nada de esto.
Muy buena esta foto que has puesto de antes de la limpieza. Exactamente es así el aspecto que tienen. Es característico y una vez que las ves sabes que ahí pasa algo raro. A ver si encuentro algo.
POr cierto, todas las que tenían decoración (Almedinilla por ejemplo), se supone que llevarían algún tipo de acabado que hiciera que resaltara ¿no?
Hola
Me he encontrado con este excelente blog. Ni me imaginaba que un tema tan misterioso como el de la pátina deliberada de las armas prerromanas le quitara el sueño a alguna otra persona en el mundo.
No puedo contribuir en nada más que en comprometerme a reproducir el efecto en cuanto lo hayan individualizado.
Una manera sería oxidarla e ir raspando los óxidos volumétricamente diferentes para que solo queden los negros. Pero no se si eso da capa de martensita o de varios otros compuestos. En mi experiencia queda siempre atrapado un porcentaje de óxido rojo que le da un tono marrón y no negro. Así que simple enterramiento no me parece.
Los japoneses hacían recubrimiento negro brillante en algunas guarniciones (tsuba) pero no estoy seguro si de magnetita o si siempre lo hacían con compuestos a base de hígado de azufre.
Saludos y espero contartarlos para probar el método que se les ocurra que pudiera usarse.
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